No Te Rindas
Mayor recompensa
Revise el mensaje de esta semana.
Escrituras clave
No se engañen. Dios no puede ser burlado. Todo lo que el hombre siembre, eso también cosechará. 8 El que siembra para sí mismo, de sí mismo cosechará corrupción; pero el que siembra para el Espíritu, del Espíritu cosechará vida eterna. 9 No nos cansemos, pues, de hacer el bien; porque a su tiempo cosecharemos, si no nos desanimamos. Gálatas 6: 7-9
Ustedes abrieron surcos para la impiedad, y lo que cosecharon fue la iniquidad. Por eso comerán el fruto de la mentira, pues confiaron en sus propias ideas y en la multitud de sus guerreros. Oseas 10:13
20 Pero hay otros, que son como lo sembrado en buena tierra. Son los que oyen la palabra y la reciben, y rinden fruto; ¡dan treinta, sesenta y hasta cien semillas por cada semilla sembrada!» Marcos 4:20
Empieza a hablar. Encuentre un iniciador de conversación para su grupo.
¿Los dos últimos mensajes han influido en alguno de sus objetivos o hábitos? ¿Si es así, cómo?
Si tuvieras la tarea de cultivar una planta, ¿qué planta cultivarías?
Empieza a pensar. Haga una pregunta para que su grupo piense.
¿Alguna vez has visto que las pequeñas cosas conducen a grandes resultados? ¿Que pasó?
Lea Gálatas 6: 7-9. Piense en lo que está sembrando en la vida en este momento. ¿Qué crees que cosecharás?
Es fácil desanimarse cuando no vemos un progreso lo suficientemente rápido. ¿Cuál es una forma en la que podría animarse a seguir adelante cuando no ve un progreso inmediato?
Empiece a compartir. Elija una pregunta para crear franqueza.
¿Has estado tentado recientemente a renunciar a algo bueno que Dios te llamó a hacer? Comparta qué tipo de obstáculos enfrenta.
¿Cómo podría acercarse a Dios o a sus seres queridos para obtener el apoyo que necesita para seguir adelante?
Empiece a orar. Sea valiente y ore con poder.
Padre, gracias por desafiarnos todos los días. Gracias por nunca dejarnos estancados. Tú nos animas y nos desarrollas y nos haces cada vez más como Tu Hijo. Ayúdanos a aceptar el trabajo que estás haciendo en nuestras vidas y, por tu gracia, nunca te rindas. En el nombre de Jesús, amén.
Empezar a hacer. Comprométete a dar un paso y vívelo esta semana.
Si estás pensando en renunciar a algo bueno, pasa tiempo en oración y busca a un amigo o familiar en busca de apoyo.